De repente, en un instante, todo desaparece. Estoy obligado a caminar indefinidamente. Camino de frente al sol, me cubro por completo de su calor, de su luz. Veo como mi sombra crece gigante detrás de mí y se deforma en la irregularidad del suelo polvoriento. La tarde es amarilla, las nubes anaranjadas; la actividad humana ha desaparecido por completo. El sudor me acaricia, me baña. Desnudo deambulo por el desierto sin vida; todo rastro de vida se ha ido. Quedo yo, solo. Espero encontrarme por fin, ante el final incierto. La emoción esta como ausente. Las orbitas se han desbordado. Se respira un aire espeso y melancólico. Se ha ido todo recuerdo. Quedo yo, solo. No es mi mundo, me encuentro en el limbo; el horizonte jamás se curva, el sol nunca se oculta. ¿A dónde a huido el tiempo? Tropiezo, caigo, no me levanto, me duermo. Me cobijo en el polvo. El deseo es estar ahí; aquí mismo, caído, recostado y tumbado, con la vista puesta en lo alto. Quedo yo, solo.
2 comentarios:
Me pongo a sus órdenes señor..yo también... una simple mujer de ciudad...
Mhh...ese desierto, todo parece un sueño...solo...
Hace mucho tiempo que no estoy completamente sola...Siempre estoy terca a acompañarme... Ja..
Saludos
Hermosa foto carnal, oye me parecen que son las líneas de Nazca en Perú, es un lugar tan solitario que hay poco viento por eso se mantienen las formas que hicieron sus primeros habitantes como barridas por el aire.
p.s. ¿Has pensado en visitarlo? (al aparecido). Sería bueno, no, a lo mejor se da cuenta que no "engendró un monstruo" como dices, sino todo lo contrario.
p.s.2 Pensé que todos éramos Budas. Pero en fin, semi-dios, felices fiestas, si no vas a cenar con tu family te vienes pa´cá, tenemos un desmadre por el trabajo pero algo comeremos y podremos reflexionar sentados como lotos mirando la luna y el viento frío golpeando nuestros rostros. Así podremos pasar momentos en silencio sin dirigirnos una sola mirada. Saludos, hermano.
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