Soy yoS

El anuncio de la XX’s tiene razón; todos andamos cazando algo. Yo ando buscando lo de siempre: volverme loco y ser feliz. “Soy una mujer lesbiana atrapada en cuerpo de hombre”. Ando buscando, no respuestas, sino preguntas, la pregunta perfecta. Ando buscando lo que todos encuentran cuando llegan a este mundo: lo que no esperaban. Lo que ando buscando solo puedo encontrarlo un instante antes de mi muerte. Invertiré el tiempo restante en propiciarme una muerte que sirva para ese un instante antes de ella. Mi caja cerebral esta destartalada, aflojada. ¡Maldita sea! ¡Quien sea! No pude encontrar un barril para vivir dentro; pero algo es algo. Tengo tres opciones; la una, coserme la boca, prenderme fuego y sangrar sin producir sonido alguno… la dos, cuando mi cuerpo moldeado proyecte por fin la figura deseada, practicarme el seppuku… la tres, la mas terriblemente solemne de todas, morir de sed en medio del desierto mas grande y desolado del mundo ¡Que me quemen las entrañas los deslunbratemente abrasadores rayos del gran astro divino!

Creo que morir ahogado en una piscina llena de semen seria una cuarta opción, sin embargo la he descartado pues pondría en tela de juicio mi solemnidad y m honor.

El maldito lumperpoeta filosófeta se atreve a insinuar que han faltado huevos. ¡Miradme bien! Y os darás cuenta que soy lo que cualquiera que desee que yo sea, seré. Soy un gran par de testículos con patas que escupe a todo aquel que se atreve a dirigirle una mirada.

Bueno, en realidad no soy gran cosa; soy un imbecil cualquiera con aires de grandeza intentado jugar a algo que nunca será, un debilucho niño que nunca creció y cuya mente quedo estancada el las pestilentes y fúnebres aguas negras de una infancia llena de soledad. Soy aquel hombre que sabiendo los males padecidos por la humanidad terrenal, se lamenta y autocompadece sin piedad, llorando ya sin lágrimas, llora dolor interno. Soy el mediocre y típico joven idealista de clase media y pobre de espíritu cuyas aspiraciones han sido, ya no trucadas por un Estado incapacitado para brindarle las mejores oportunidades de desarrollo en su calidad de vida, sino por la propia incapacidad intelectual para aceptar vivir en un mundo, que desde siempre, no podría cambiar. Soy el melodramático. Soy el solemne. El Recto. El Firme. Contradicción contraria a las contradicciones comunes.

Soy el empapado en sudor destilado en excremento, cuyo ano huele a cloaca y cuyas patas despellejadas nos remontas a la época del perro sarnoso que caminaba erguido y era dueño de un hombre leproso… ¡Huele a putrefacto! Alcanzo a divisar mi reflejo en el monitor ¡Soy tu! Solo mírate en el espejo. Es una orden.